El néctar de los lobos

Espacio de placer sensorial. Cuentos, poesía, fotografía, periodismo... empalmes creativos. Los llaman góticos, de terror, románticos, de amor, de nostalgia, de abandono, de venganza... de la vida misma. Tinta electrónica que, aun sin ser palpable, es transmisible... Un vouyerismo literario.

Permíteme el universo


Hoy desperté con ganas de hacerte una poesía,
de lograrte una sonrisa capaz de regar mis bosques secos.

Hoy tuve ganas de usar tu rostro como papel
y ahí escribir mis versos con las plumas de mis dedos.


Tal vez fue porque sabía que hoy te miraría de cerca
que decidí darle sol a mis virtudes y hacer eclipse mis errores.

Será que hoy amanecí queriendo ser agua de rosas
y quería bautizar tu cuerpo con el fresco de mis colores.


Y hoy que te veo, las palabras se me suicidan.

Te miran y no saben cuál de todas es la que necesito sacar.

Se miran entre ellas y prefieren dispararse en la sien.

Primero muertas que salir de la comodidad de mis pensares.


Hoy quiero ver si puedes permitirme el universo.

No tienes que hacer nada: sólo sonríe.

Tu risa es el idioma con el que le hablo a las estrellas.

No me niegues el cielo. Sólo vuelca ese par de planetas que sale de tus ojos.

5 comentarios:

¿Es posible que el perímetro de tus versos asemejen una escultura de Yvonne Domenge?
La naturaleza, el cosmos, los materiales...

Es un suponer.
Un saludo.

 

Hola, Javier!!

Qué interesante comparación. La verdad que no se me habría ocurrido un paralelismo con las estructuras de Domenge. Puede ser, más que en los referentes, en las intenciones: la idea de la inmensidad. Así ocurre cuando la sangre bombea, ya sea para amar o para odiar. Ahí las letras se encuentran.

Muchas gracias por nutrirme. Saludos desde México.

 

Hay ojos que están llenos de universos. Dar con una persona así es una completa suerte que no se debe dejar escapar con silencios. Háblale, que sepa que esos universos son tu obsesión. :)

 

Me encantaría hacerlo, mi querida Nínfula, pero esos universos forman parte de una constelación a la que no pertenezco. De ahí el poema que le antecede a éste. Un abrazo y gracias por sentir conmigo.

 

"Hoy quiero ver si puedes permitirme el universo.

No tienes que hacer nada: sólo sonríe.

Tu risa es el idioma con el que le hablo a las estrellas.

No me niegues el cielo. Sólo vuelca ese par de planetas que sale de tus ojos".

Sabes???? es como si tu escribieras lo que ahora siente mi alma...

 

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